Marketing de guerrilla

Curioso cartel para anunciar algo también curioso, una bendición masiva de mascotas en una iglesia anglicana de Nueva Zelanda. El clásico cartel de 'cuidado con el perro' se convierte en 'estate atento al Dios'

Por otra parte, en Berlín se les ha ocurrido esta idea redonda para utilizar como soporte publicitario las asas que se disponen en autobuses y otros transportes públicos para poder sujetarse en el vehículo en marcha.

Este tipo de marketing es conocido como guerrilla, se distingue por agrupar todas aquellas acciones dirigidas a llamar la atención, generando rumores que vayan de boca en boca, de manera que el receptor del mensaje sea también emisor, y por lo tanto, evidenciando su mayor ventaja: unos costes mucho menores que un anuncio de 30 segundos en televisión.

Actualmente la sociedad, está constantemente bombardeada por propagandas, promociones, mercadeo directo, telemarketing y otras diversas formas de aproximaciones y comunicaciones provenientes de un sinnúmero de competidores.

No basta con la presencia empresarial en los medios más comunes, tales como la radio, la TV y los periódicos. Esos son los medios más comunes y también tal vez la mayoría de las veces los más caros y los que con menos precisión alcanzan a nuestros clientes en perspectiva. Por estos medios, se logra dirigir a todos y a ninguno de los clientes en particular. Además, les ofrecemos todo lo que tal vez pueden necesitar, pero no les ofrecemos lo que con más certeza están necesitando en ese momento

Todo es posible

Como podemos deducir de las anteriores explicaciones, puede decirse que todo es posible en el “marketing de guerrilla”. Aunque, desde luego, debe quedar muy claro que no se trata solamente de salir a la calle para pintar las paredes o gritar el nombre de la empresa.
Lo fundamental en este tipo de acciones de marketing es que exista una estrategia planeada en función de unos objetivos, en términos de valor del sitio o del producto; que el mensaje conecte con el público objetivo, en función de sus intereses y la forma en que están expuestos tanto a los medios online como convencionales; que dicho mensaje tenga una proposición de valor o beneficio para ellos; y por último, que sea creativo y llegue al receptor de una manera original.